lunes, 27 de febrero de 2017

Brodas Bros

Antes de Brodas Bros




Espectáculo de baile y música en el Teatro de la Luz Philips de la Gran Vía. 
La música afecta al cerebro al  igual que el sexo, las drogas o el alcohol, así que vamos a dejar la respiración se altere, el ritmo cardíaco aumente, las pupilas se dilaten y las endorfinas se disparen con movimientos coordinados y con flow.


Después de Brodas Bros 



¿Habéis estado en festivales de música? Seguro que cuando hayáis ido, ha habido uno o dos grupos que no conocéis/ habéis escuchado demasiado, os acercáis por curiosidad hasta que empiece el siguiente grupo que os mola y veis el fanatismo alrededor vuestra. 
Al igual que cuando fui a ver cierto espectáculo de flamenco de cuyo nombre no quiero acordarme (fui por probar, yo qué sé) no me gustó nada, en este show de los Brodas Bros me he sentido rara, incómoda, desubicada. 

Los Brodas Bros derrochan energía, bailan muy bien y se nota que se lo pasan bien en el escenario, ¿entonces, por qué no me llega? ¿Por qué el resto del público es receptivo y yo no? ¿Por qué los gags de humor me hacen mirar a los lados y preguntarme de qué se ríe toda esta gente? ¿Por qué dicen que les gusta la improvisación cuando los bailes están absolutamente coreografiados? ¿Por qué he sufrido un gatillazo cuando tenía unas condiciones tan favorables?
Todo el mundo no va a estar equivocado menos yo, eso sería egocéntrico, pedante e irreal, la respuesta, que podría simplificarla y decir que 'porque te tocas por las noches' es mucho más simple:  'los gustos son como los culos, cada uno tiene el suyo'.


viernes, 24 de febrero de 2017

Ira

Ira


Con una pregunta como subtítulo tan contundente y abierto a la polémica como '¿Matarías al asesino de tu hijo?' es imposible no sentir curiosidad.
 ¿Y tú? ¿Qué harías? Yo de pronto, ver esta película.


Después de Ira

 Las reglas las tienes en el Código Penal.


Vamos a jugar a un juego que ya conocemos, y que nos viene impuesto desde que Caín mató a Abel. Un juego que pone a prueba nuestra capacidad de conocernos a nosotros mismos para saber hasta qué punto haríamos algo parecido a lo que muestra la película. Un juego de castigo. El juego de la justicia.

Rodada como un falso documental (aunque yo dudaba a veces de que fuera falso por la brillantez y originalidad en la dirección de la película), muestra las distintas formas de justicia que hay, de cómo trata las reglas impuestas por cada sociedad un mismo crimen, y de cómo si estas normas artificiales (lo que llamamos 'justicia') no funcionan, un hombre normal puede llegar a convertirse en un psicópata.

Ira es una dura crítica contra la justicia, pero también es un thriller asfixiante, 90 minutos de no poder apartar la mirada, una película en la que desarrollas tu empatía psicopática, una historia de expectación, sentimientos encontrados e interés que perdura más allá de sus títulos de crédito.

¿Podemos confiar en la justicia? Que cada cual saque sus propias conclusiones después de haber visto este peliculón, pero sin duda, la verdadera injusticia sería que esta película pasara desapercibida por el público.

domingo, 12 de febrero de 2017

De Caperucita a Loba en Solo Seis Tíos

Antes de De Caperucita a Loba en Solo Seis Tíos


Después de una tarde de curro coñazo, y tras varios meses sin pisar un teatro, aburrida de escribir artículos de películas oscarizables y de gusto cuestionable, la joven (viejoven más bien) atolondrada con sus grandes dotes para la expresión oral, exclamó:

-Buah chaval, voy a ir al teatro, ¡¡¡buah!!!



Después de De Caperucita a Loba en Solo Seis Tíos

 Una loba en el teatro, tiene ganas de reír ¡auuuuu!



He aquí la primera terapia en forma de stand up con la que me encuentro.

El espectador toma asiento en el diván en forma de butaca esperando reírse durante un buen rato, tratando de olvidarse momentáneamente de sus problemas. Aún no sabe cúan equivocado está.
Durante 90 minutos, Marta (y sus amantes) nos proponen afrontar la vida de otra forma. De Caperucita a Loba trata de mejorar tu vida más allá de esos 90 minutos a través de un monólogo con humor e inteligencia en el que encaja perfectamente ciencia con versiones de canciones Disney (qué voz tan bonita, por cierto).

El paciente no hace falta que hable, porque ya se encarga la loba del escenario en presentar las escenas amorosas por las que ha pasado. Y el público lo corrobora y se ríe, porque no hay nada cómo reírse de las escenas que uno ha pasado, ha dramatizado y ahora ve con la perspectiva cambiada, viéndose reflejado en situaciones lamentables por las que todos pasamos. Pero ahora en clave de humor, eso sí.

Al final del espectáculo, cuando nos hicimos la foto, Marta nos dijo algo así como 'qué bueno es ver reírse tanto a gente en la primera fila'.
Marta, qué bueno es que nos hagan reír así.




miércoles, 8 de febrero de 2017

Hedi, Un viento de libertad

Antes de Hedi, Un viento de libertad


-¿Qué es para ti la libertad, Hansy?
-¿Ein? Eso para mí no existe.
-Pero si tu contraseña era...
-Y sigue siendo... No sé qué estás escribiendo, estoy viendo la tele. 
-Para mí la libertad es esa creatividad que inunda tu mente para imaginar la tarta perfecta. Y hacerla. Es bailar descalza hasta que te tengas que dar una ducha por el sudor.
Es mear con la puerta abierta.
Es reírse a carcajadas.
Es comer chuches cuando quieras. Y luego tener que lavarse los dientes, pero eso no es libertad, quizá sea neurosis.
Es ir sin paraguas bajo la lluvia, únicamente resguardada bajo un sombrero de caballero, negro, elegante.
-Esto ha empezado como una redacción del colegio. ¿No estarás escribiendo una crítica, no?




Después Hedi, Un viento de libertad

 Me da que nuestro concepto de libertad es totalmente opuesto. 
Y el estar comiendo chuches con la excusa que es para el después de. Eso también es libertad.

Cuando el 'anodismo' se confunde con sutilidad, el acoso se transforma en amor y la irresponsabilidad toma el carácter de libertad, aparecen películas tunecinas.

 Túnez, actualidad. El joven Hedi tiene que casarse con una chica elegida por su familia. Pero a pocos días de la boda conoce a una guía turística.
Hedi, (personaje y película) nos enseña la dualidad de su historia y del propio país. De cómo lo moderno y lo turístico convive con la sobriedad de lo tradicional, de las distintas libertades que tiene una mujer y de la importancia de la independencia para tratar de ser feliz.

El protagonista apocado y controlado por las decisiones de su madre, decide tomar las riendas de su vida por sí mismo, pero resulta demasiado insustancial y aburrido como para despertar el interés y la empatía del espectador. El amor entre éste y su amante transcurre de forma tosca y sin naturalidad (y al principio demasiado molesto incluso, quizá hasta resultar acoso), la irresponsabilidad de sus actos y su toma de decisiones convierte a la libertad en libertinaje, y ese final me plantea seriamente si acabo de ver el 'no sé qué hacer con mi vida' hecha película.




sábado, 4 de febrero de 2017

Jackie

Antes de Jackie


Creo que aún no soy lo suficientemente vieja/ madura/ filántropa para que me interese la vida de la mujer de un presidente de Estados Unidos. Pero Natalie Portman es bien y todo lo que haga esta mujer me interesa.

Después de Jackie

 Ahora todos somos tan listos que pillamos referencias de hace años en los Simpsons, ¿no?

Natalie Portman coge el corazón roto de Jackie y lo convierte en arte. Una bala acertada basta para que veamos  todo el potencial de esta mujer.
Con una narración no lineal llena de regresiones de una vida envidiable que contrastan con una 'actual' Jackie destrozada hacen más amena la historia que nos tiene que contar. Historia sí, y no verdad, porque ésta desaparece como el líquido segregado por los ojos en precipitaciones atmosféricas, y solo nos queda la historia en los libros como verdad prostituida.
¿Qué? ¿Pedante, verdad? Pues tendríais que ir a pases de prensa.

Sigue sin interesarme lo más mínimo esta mujer, pero maldita sea, Natalie, cómo puedes ser tan hipnótica, jodía.